MÉRIDA, 5 Nov.

Este martes, el Centro de Atención de Urgencias y Emergencias 112 Extremadura conmemora su 25 aniversario, un hito significativo que atestigua su rol esencial en la atención de emergencias en la región. Durante este período, el centro ha logrado atender más de 17 millones de llamadas y gestionar un impresionante total de 2,6 millones de incidentes.

Desde su creación, el 112 Extremadura se ha erigido como un "pilar fundamental" en la gestión de crisis, brindando "dedicación" y un firme "servicio público" a la ciudadanía, elementos que destacan en su compromiso diario.

Marisol Ponce, directora del 112 Extremadura, recordó con claridad la crisis de incendios forestales que afectó a la región en agosto de 2003. Según sus declaraciones, “durante los primeros 15 días de ese mes, el fuego no dio tregua, poniendo a prueba la capacidad de respuesta del 112 y de los servicios intervinientes”. Afortunadamente, su profesionalismo fue clave para que esta “catástrofe medioambiental” no resultara en víctimas mortales.

Desde ese trágico episodio, el 112 Extremadura ha estado al frente de la coordinación ante numerosos incendios en años posteriores, incluyendo los devastadores incidentes de 2008, 2015 y 2017, así como otras situaciones críticas, como las inundaciones de 2013 en Balboa y sus alrededores.

La activación de planes de protección civil ha sido crucial en estos eventos, muchos de los cuales han sido desarrollados gracias al empeño y la dedicación del personal del 112, que ha trabajado incansablemente para salvaguardar a la población.

Marisol Ponce enfatizó que, durante los últimos 25 años, el 112 Extremadura ha contado con una plantilla media de más de 100 profesionales que operan los 365 días del año, 24 horas al día, garantizando así una "respuesta continua y eficiente" ante cualquier eventualidad.

La existencia de planes territoriales y especiales de Protección Civil ha sido "crucial" para la toma de decisiones rápidas y la coordinación eficaz entre los distintos servicios de emergencia, lo que ha permitido manejar crisis de manera más efectiva.

Desde su inicio, el 112 Extremadura se ha consolidado como un centro integrador de todos los servicios de urgencia y emergencia, demostrando su eficacia en incontables ocasiones en su misión de proteger a los ciudadanos.

La Junta de Extremadura también destacó que el 112 ha jugado un papel crucial en grandes accidentes que han dejado huella, como los trágicos accidentes de autobús ocurridos en Miajadas en 2009 y en Monterrubio en 2014.

Asimismo, la labor del 112 ha reflejado el “espíritu solidario” del pueblo extremeño en situaciones críticas, como fue el caso de la catástrofe del Prestige en las costas gallegas y el devastador terremoto en El Salvador en 2001, donde integrantes del 112 se desplazaron para ofrecer su apoyo en la recuperación y ayuda humanitaria.

Desde sus inicios, el 112 Extremadura ha promovido activamente una cultura de prevención, buscando educar a la ciudadanía sobre los riesgos cotidianos y las maneras de enfrentarlos. Esta crucial labor educativa ha abarcado todos los ámbitos, desde los colegios hasta los hogares de personas mayores, fomentando así una sociedad “más preparada y consciente”, según lo afirmado por el Gobierno regional.