En una operación llevada a cabo por la Guardia Civil, se han interceptado 913 kilos de carne de cerdo congelada en un camión sin refrigeración. El vehículo, proveniente de Móstoles y con destino a Fuente de Cantos, fue detenido en la carretera N-630 en Torremejía, excediendo el peso autorizado en 700 kilos.
Tras una inspección, se descubrió que la carne congelada no estaba siendo correctamente refrigerada, poniendo en riesgo su aptitud para el consumo. La carga fue precintada y devuelta a su origen por inspectores del Servicio Extremeño de Salud debido a las "deficiencias e irregularidades" en el transporte.
La empresa de transporte del camión frigorífico enfrenta ahora sanciones por varias infracciones, incluyendo la falta de autorización para el vehículo, exceso de carga, y la ausencia de un termógrafo para controlar la temperatura. Las autoridades sanitarias competentes determinarán las medidas adicionales que se tomarán en este caso.
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