La inauguración del Museo Nacional de Arte Romano fue un hito importante en la historia de Extremadura. En el contexto del siglo XVIII, España estaba experimentando un período de renovación cultural y arquitectónica, conocido como el Siglo de las Luces o Ilustración. Este movimiento buscaba promover la educación, la ciencia y la cultura, y en este contexto se construyó el museo en Mérida en 1986, ubicado en un edificio diseñado por el renombrado arquitecto Rafael Moneo.
El Museo Nacional de Arte Romano alberga una impresionante colección de arte romano de la antigua colonia Augusta Emerita. Entre sus piezas más destacadas se encuentran estatuas, mosaicos, objetos de uso cotidiano y restos arqueológicos que proporcionan una visión única de la vida en la antigua Mérida romana. El museo se ha convertido en un referente internacional en el estudio y la difusión del arte romano en la Península Ibérica.
La inauguración del Museo Nacional de Arte Romano fue un acontecimiento de gran relevancia para la comunidad arqueológica y cultural. La ceremonia de apertura contó con la presencia de destacadas personalidades del mundo de la arqueología, la política y la cultura, tanto a nivel nacional como internacional. El evento incluyó discursos, visitas guiadas y actividades culturales para conmemorar la apertura de este importante centro cultural.
La apertura del Museo Nacional de Arte Romano tuvo un impacto positivo en la comunidad de Mérida y de Extremadura en general. El museo se convirtió en un importante centro de investigación y difusión del arte romano, atrayendo a visitantes nacionales e internacionales interesados en conocer la historia y la cultura de la antigua Mérida. Además, la presencia del museo ha contribuido a la revitalización económica y turística de la ciudad y la región.
Desde su inauguración, el Museo Nacional de Arte Romano ha continuado creciendo y expandiéndose, enriqueciendo su colección y ampliando sus actividades culturales y educativas. El museo se ha consolidado como un referente en el estudio del arte romano en la Península Ibérica y sigue atrayendo a investigadores, estudiantes y amantes de la historia de todo el mundo. Su legado perdurará en el tiempo, contribuyendo a la preservación y difusión del patrimonio arqueológico de la antigua colonia Augusta Emerita.