En Mérida, el 2 de mayo, se ha producido un hecho relevante en el ámbito de la seguridad ciudadana. La Policía Nacional, en conjunto con la Policía Local, ejecutó una operación que culminó con la detención de un individuo señalado como el principal responsable de un centro de venta de drogas en la conocida barriada de Antonio Domínguez.

El episodio empezó a gestarse a principios de abril, cuando el equipo de agentes especializados en narcóticos advirtió un inusual movimiento de personas con antecedentes de consumo de sustancias estupefacientes en la zona, lo que despertó sospechas sobre la existencia de un puesto de venta de drogas. Así, se dieron inicio a las investigaciones necesarias para identificar y cerrar dicho punto.

La inquietud de los residentes de la barriada fue palpable y se comunicó de manera anónima a las autoridades, lo que llevó a la implementación de operativos de vigilancia y control en colaboración con la Jefatura de Policía Local, todo con el fin de restaurar la tranquilidad y seguridad en la comunidad.

Gracias a estos dispositivos, los agentes pudieron asegurar sustancias adquiridas en el punto de venta, lo que condujo a la ubicación y plena identificación del sospechoso. El 30 de abril, con la correspondiente autorización judicial, se llevó a cabo un registro en la vivienda ubicada en la calle Tomillo, desactivando la actividad ilícita que allí se realizaba.

Durante la operación, se hallaron siete personas en el interior de la vivienda, siendo el encargado del lugar detenido de inmediato. La Policía Nacional destacó que uno de los cuartos estaba destinado exclusivamente a la comercialización de drogas, mientras que otros eran usados como "fumaderos".

Un aspecto alarmante descubierto por los agentes fue la intención de los involucrados de erigir muros en algunas habitaciones, dando lugar a la formación de un "bunker" para facilitar la venta y eludir una eventual intervención de la policía.

Los operativos resultaron en la incautación de 2,8 gramos de heroína, 2,3 gramos de cocaína, 2,8 gramos de hachís, junto con pastillas de benzodiacepinas y 12 dosis listas para el consumo. También fueron confiscados instrumentos como una balanza de precisión y otros elementos utilizados en la distribución de droga.

La intervención fue posible gracias a la colaboración entre distintas unidades de la Policía Judicial y la Seguridad Ciudadana de la Comisaría Provincial de Badajoz, junto con la Policía Local. El individuo arrestado, de 37 años y con antecedentes, ha sido remitido a la autoridad judicial tras la conclusión de los procedimientos necesarios.