CÁCERES, 17 de diciembre.

La pintoresca localidad de Ceclavín, en la provincia de Cáceres, se prepara para celebrar del 23 al 27 de diciembre sus emblemáticas fiestas conocidas como 'La Borrasca'. Este evento festivo busca obtener el título de Interés Turístico Regional, debido a la valiosa tradición que representa para la comunidad. Cada año, los habitantes de Ceclavín viven la Navidad con gran fervor, destacando el día de 'La Machorrita' y las emocionantes carreras de caballos que recorren la calle Granadera.

El alcalde de Ceclavín, Arturo Gómez Macías, acompañado de la diputada de Agricultura de la Diputación de Cáceres, Angélica García, presentó este martes los detalles de las festividades. "Las fiestas de la Borrasca no son simplemente un evento más en el calendario navideño; son una manifestación vibrante de nuestra identidad, un testimonio de nuestras raíces y un legado que cultivamos y transmitimos con orgullo a lo largo de las generaciones", aseveró el regidor.

Gómez Macías subrayó la importancia de estas celebraciones como un medio esencial para preservar y comunicar las tradiciones locales a los más jóvenes. "Estas fiestas son vitales para mantener vivas nuestras costumbres y asegurar que perduren en el tiempo", afirmó con convicción.

El ciclo festivo comienza el 23 de diciembre, en la víspera de Nochebuena, cuando los grupos de amigos, conocidos como "borrascas", se reúnen cada uno con su "machorrita", una cabra estéril que se convierte en la protagonista de la festividad. Los participantes se dirigen a la Plaza de España, donde entonan canciones típicas que resuenan en el aire navideño.

Si bien en el pasado la tradición dictaba que esta cabra se sacrificara para la cena de Nochebuena y los días de Navidad, el alcalde aclaró que "eso ya no se hace" y que las cabras regresan al campo esa misma noche, sanas y salvas, junto a otros animales. "No les pasa absolutamente nada", destacó con alivio el primer edil.

Los días 26 y 27 de diciembre, durante las horas de 16:00 a 18:00, se llevarán a cabo las esperadas carreras de caballos. Más de cien jinetes se preparan para bajar por la calle Granadera, un espectáculo que promete ser memorable. "Desde temprano, nos dedicamos a preparar nuestros caballos y carros para rendir homenaje a Nuestra Señora del Encinar, la patrona de Ceclavín", explicó Gómez Macías, resaltando la devoción de los participantes.

Una vez que llegan al santuario, los jinetes realizan tres círculos en sentido contrario a las agujas del reloj como parte de un ritual que busca obtener la protección y bendición para sus caballos. Tras esta ceremonia, los jinetes regresan al pueblo para disfrutar de bailes y visitas, mientras la emoción se intensifica a medida que se acerca la hora de las competiciones.

Estos festejos atraen a numerosos turistas, generando un dinamismo comercial y fomentando la hospitalidad que define a Ceclavín. "Aquí, nadie se siente forastero. Las puertas de nuestras casas están siempre abiertas y nunca falta un vaso de vino, un coquillo o un cachino de patatera para quienes nos visitan", aseguró el alcalde durante la presentación.

"Estas fiestas no solo son un motivo de celebración para los ceclavineros, sino también una ocasión para abrir nuestras puertas al mundo y mostrar la riqueza de nuestra tierra, el encanto de nuestras calles y, sobre todo, la calidez de nuestra gente", recalcó con entusiasmo.

Asimismo, Ceclavín ya cuenta con dos esculturas dedicadas a estas fiestas: una ubicada en la Plaza de España que representa a 'La Machorrita' y otra inaugurada recientemente dedicada a los caballistas. Además, se ha elaborado un libro que se creó hace dos años, y este año se distribuirá entre los vecinos una recopilación de cancionero, enriqueciendo aún más la tradición.

En búsqueda de mayor reconocimiento, Ceclavín ha solicitado a la Consejería de Turismo de la Junta de Extremadura la declaración de Fiesta de Interés Turístico Regional. Aunque el origen de la celebración no es del todo claro, sí posee elementos de carácter religioso al coincidir con la época navideña. Los documentos más antiguos que se poseen datan de 1927, cuando se mencionaron estos festejos en un periódico provincial, aunque se cree que la tradición es mucho más antigua.

El nombre de 'La Borrasca' hace referencia a un grupo de amigos que se agrupan para generar jaleos y bullicio en las calles. "Se dice que por ahí viene una borrasca cantando", explicó el alcalde, capturando así el espíritu festivo y animado de estas celebraciones.