En un desarrollo significativo para la gestión de incendios, las comunidades de Extremadura y Castilla-La Mancha han formalizado hoy un acuerdo destinado a mejorar la cooperación en la lucha contra los incendios forestales en las zonas fronterizas que comparten.

El protocolo fue firmado en la localidad de Navalmoral de la Mata por la consejera de Desarrollo Sostenible de Castilla-La Mancha, Mercedes Gómez Rodríguez, y el consejero de Gestión Forestal y Mundo Rural de Extremadura, Ignacio Higuero.

Higuero comentó tras la firma sobre el valioso esfuerzo que ambas regiones llevan a cabo para salvaguardar su “valioso patrimonio forestal,” que pertenece tanto a los extremeños como a los manchegos. Subrayó la importancia de unir esfuerzos para proteger estas áreas de gran belleza natural.

El consejero destacó que la proximidad de casi 400 kilómetros de frontera entre ambas comunidades requiere una acción conjunta efectuada por los equipos de bomberos. Esto ayudará a asegurar que cualquier conato de incendio se controle rápidamente antes de que se convierta en un problema mayor.

En su mensaje a la población, Higuero instó a los ciudadanos a actuar con “prudencia” y “responsabilidad,” especialmente con un verano próximo que promete condiciones propicias para la proliferación de incendios debido a la abundante vegetación.

Mercedes Gómez, por su parte, enfatizó que “los incendios no conocen de fronteras” y subrayó la necesidad de colaboración entre comunidades en situaciones de emergencia, poniendo de manifiesto el esfuerzo conjunto que ha sido la base para la firma de este acuerdo.

La consejera también hizo hincapié en la importancia de establecer un mando unificado, lo que permitirá una respuesta más eficaz y una mejor coordinación entre las distintas agencias. “Actuar juntos es fundamental para controlar y extinguir cualquier incendio que pueda presentarse,” indicó.

La esencia de este protocolo es garantizar que las emergencias se puedan manejar eficazmente en su fase inicial, evitando que se conviertan en situaciones de gran magnitud. “La prevención es tan importante como la extinción,” añadió, haciendo un llamado a la responsabilidad ciudadana en los periodos más críticos para los incendios forestales.

Concretamente, este acuerdo surge de la necesidad de una respuesta efectiva frente a los incendios en la llamada Zona de Actuación Conjunta ante Incendios Forestales (ZACIF), que se extiende cinco kilómetros a cada lado de la frontera entre ambas comunidades.

La interacción entre los operativos de ambas regiones es fundamental, dadas las características geográficas que pueden exacerbar la rápida propagación de las llamas, según lo estipulado en el acuerdo.

Entre las medidas más destacadas del protocolo se encuentran procedimientos de colaboración inmediata, la creación de un Mando Unificado de Extinción (MUE) para incendios afectando a ambas comunidades, y un Puesto de Mando Avanzado común. Todo ello permitirá una toma de decisiones coordinada y eficiente.

Asimismo, se establecerá una Comisión Técnica de Seguimiento que evaluará la efectividad del protocolo y propondrá mejoras, asegurando que ambas comunidades sigan compartiendo información crítica sobre los recursos disponibles cada año. Esto facilitará respuestas rápidas a las emergencias.

Este acuerdo tendrá una vigencia inicial de cuatro años, renovable, y representa un notable esfuerzo de cooperación entre territorios, centrado en la seguridad tanto del entorno natural como de la ciudadanía.

El acto tuvo lugar en el Centro de Formación Rural de Navalmoral de la Mata y contó con la presencia de diversas autoridades locales y regionales, subrayando el compromiso conjunto para la protección del medio ambiente y la seguridad pública.