En Mérida, a 26 de diciembre, el líder de la Comisión Gestora del PSOE en Extremadura, José Luis Quintana, ha delegado la responsabilidad de las negociaciones para la investidura en María Guardiola, la reciente ganadora de las elecciones. Sin embargo, Quintana ha sido claro al distanciarse de cualquier idea de abstención que permita la formación de un nuevo Gobierno regional, reafirmando que el Partido Socialista se presenta como la opción de oposición al PP y no tiene intención de actuar como su socio en el gobierno.

Quintana efectuó estas declaraciones en su primera aparición ante los medios tras la creación de la Comisión Gestora, la cual se encargará de dirigir al partido hasta el Congreso Regional previsto tras la renuncia de Miguel Ángel Gallardo como secretario general, cuya dimisión fue consecuencia de los desfavorables resultados obtenidos en las elecciones del pasado domingo. Se apunta que el congreso podría tener lugar en mayo.

Durante este período, la gestora tendrá que tomar decisiones urgentes, entre ellas la formación del grupo parlamentario y la selección de los representantes socialistas que integrarán la Mesa de la Asamblea, además de definir la postura que adoptarán respecto a la investidura.

En este sentido, Quintana no ha sido concreto sobre la estrategia electoral del PSOE. Ha indicado que será el partido vencedor el encargado de tomar la delantera en la negociación y ha reiterado que el Partido Popular es el que debe asumir el liderazgo en este asunto.

Quintana enfatizó: "Hay un partido que es el más votado y es el que tiene que tomar la iniciativa". Agregó que, si el PP considera que debe contar con ciertos socios, actuará de acuerdo con esa visión.

A la vez, subrayó que las responsabilidades de la gestora no incluyen hacer "decisiones estratégicas de largo plazo", reafirmando que el PSOE mantiene una "posición de alternancia" y no es un "socio de gobierno" del Partido Popular.

En sus declaraciones, Quintana dejó claro que el PSOE se considera como la alternativa idónea frente al PP, insistiendo en que es el Partido Popular el que necesita tomar la iniciativa en este momento crítico. Además, declaró que sería un "fracaso" para María Guardiola si solicitara la colaboración de los socialistas para facilitar su investidura.

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