En la localidad de Cuacos de Yuste, en la provincia de Cáceres, un devastador incendio forestal ha llevado a las autoridades a tomar decisiones drásticas para salvaguardar a los residentes. La situación ha requerido el confinamiento de la población, dado el alto riesgo de inhalación de humos nocivos procedentes del fuego que se aproxima. Además, las llamas han hecho necesario el desalojo del histórico Monasterio de Yuste, que se encuentra en la trayectoria del incendio.

Para garantizar la seguridad de los ciudadanos y facilitar las tareas de los equipos de emergencia, se ha tomado la medida de cerrar la carretera EX-203 en el segmento que va desde Jaraíz de la Vera hasta Cuacos de Yuste. Esta acción ha sido comunicada por la Guardia Civil, que se encuentra coordinando esfuerzos en la zona.

Múltiples unidades de la Guardia Civil, incluidos agentes de Seguridad Ciudadana, Tráfico y del Seprona, están presentes en el área afectada. Estas patrullas no solo brindan apoyo logístico a los equipos de extinción, sino que también se encargan de supervisar y asegurar la integridad de la población y su entorno inmediato.

Ante la creciente amenaza de este incendio, el Plan de Lucha contra Incendios Forestales de Extremadura (Infoex) ha activado el nivel 1 de alerta. Las operaciones de extinción están siendo dirigidas por equipos de la Junta de Extremadura, del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, así como del Servicio Provincial de Extinción de Incendios (Sepei). La colaboración entre instituciones es crucial en momentos como este, donde la protección del medio ambiente y la seguridad de los ciudadanos están en juego.