El Ayuntamiento de Mérida ha decidido tomar cartas en el asunto del control de la población de palomas en la ciudad, adjudicando un contrato valorado en 18.000 euros a la empresa Athisa Sanidad Ambiental. Este acuerdo contempla la instalación de 20 jaulas en diversas áreas urbanas, con el objetivo de reducir la proliferación de estas aves y, de esta manera, mitigar los problemas que generan.
Las labores que se llevarán a cabo están diseñadas para ser lo menos intrusivas posible para los ciudadanos. El Ayuntamiento asegura que se realizarán "de manera profesional", bajo el principio de minimizar cualquier riesgo tanto para las personas como para el entorno, todo ello en cumplimiento de la normativa vigente sobre protección animal.
Además, se dará especial atención al bienestar de las aves capturadas. Los dispositivos de captura serán revisados periódicamente para evitarles estrés, y la ubicación de estas jaulas será rotada conforme a las necesidades, teniendo en cuenta la estructura de los edificios y cualquier circunstancia que surja, según lo indique el personal técnico del municipio.
En paralelo, el consistorio está en proceso de licitar un contrato más amplio que supera los 70.000 euros, el cual permitirá establecer un sistema de control constante de esta especie, evidenciando la seriedad con la que se aborda el problema.
Por otro lado, el Ayuntamiento ha habilitado un canal de comunicación para que los ciudadanos puedan reportar sus inquietudes sobre la presencia de palomas. A través del correo electrónico [email protected], los vecinos pueden solicitar la colocación de jaulas en propiedades privadas.
Los residentes recibirán un formulario diseñado para evaluar si sus edificios son aptos para la instalación de las jaulas. Si se determina que el lugar es adecuado, la empresa contratada procederá a solicitar la autorización de todos los propietarios para llevar a cabo la instalación, así como permiso para acceder a las jaulas de manera autónoma mientras estas permanezcan en el lugar.
El Ayuntamiento también ha subrayado que la cantidad de palomas que pueden encontrarse en un área específica está íntimamente relacionada con la disponibilidad de alimentos, agua y refugios. Por este motivo, la administración local hace un llamado a la ciudadanía para que evite alimentar a las palomas en espacios públicos, ya que prácticas como darles de comer desde balcones o terrazas contribuyen a la proliferación de estas aves, dificultando los esfuerzos de control poblacional.
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