Crónica Extremadura.

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Asociaciones extremeñas de personas sordas critican la atención temprana y el aislamiento en mayores

Asociaciones extremeñas de personas sordas critican la atención temprana y el aislamiento en mayores

En la ciudad de Mérida, miembros de asociaciones de personas sordas de Extremadura se congregaron en la Plaza de España para destacar la importancia de la atención temprana en la infancia y el apoyo a los adultos mayores con discapacidad auditiva en la región.

La presidenta de la Asociación de Personas Sordas de Cáceres, María Teresa Berrocoso, enfatizó la necesidad de brindar educación de calidad a los niños sordos, especialmente para garantizarles acceso a la lengua de signos, que es crucial para su acceso a la información, independientemente de los audífonos o implantes que utilicen.

Por otro lado, miembros de la Asociación de Personas Sordas de Badajoz subrayaron la importancia de intervenir en residencias de mayores para evitar que las personas sordas se sientan solas y carezcan de apoyo al realizar acciones cotidianas como tomar medicamentos.

Desde Aspesoba abogan por la llegada de VidAsor a Extremadura, un servicio de videoasistencia y acompañamiento para personas mayores sordas en situación de vulnerabilidad o que viven solas, que establece un contacto diario a través de la televisión convencional para monitorear su salud y brindar asistencia.

En el marco de la celebración, representantes de la Asociación de Personas Sordas de Mérida solicitaron al alcalde ampliar el espacio cedido para ofrecer una mejor atención a la comunidad sorda.

Durante el evento, se leyó un manifiesto nacional de la CNSE que destaca la importancia de garantizar los derechos de las personas sordas, incluyendo la incorporación de profesionales sordos en la enseñanza y traducción de la lengua de signos, así como la necesidad de servicios de interpretación gratuitos y de calidad en todos los ámbitos de la vida.

La confederación también hizo un llamado a asegurar el acceso a prótesis auditivas y su mantenimiento sin que la situación económica sea una barrera, y a mantener las ayudas a las entidades del movimiento asociativo de las personas sordas para evitar la ampliación de la brecha con el resto de la sociedad.