En un hecho sin precedentes desde el inicio de la crisis sanitaria provocada por el COVID-19, la Comunidad Autónoma de Extremadura ha experimentado una disminución en el número de denuncias y víctimas de violencia de género durante el primer trimestre del año en comparación con el mismo periodo del año anterior.

Según los datos proporcionados por los juzgados de violencia sobre la mujer, se registraron 824 denuncias presentadas por 718 víctimas, lo que representa un descenso del 11,8 % y 0,1 % respectivamente en comparación con el año anterior.

El Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género ha informado que un 77,3 % menos de mujeres víctimas se han acogido a la dispensa de la obligación de prestar declaración en este trimestre, lo que indica un cambio significativo en la situación.

Además, se han emitido un total de 113 órdenes de protección, marcando un descenso del 29,4% en comparación con el primer trimestre del año pasado, mientras que las sentencias han aumentado en un 17,4%, con un total de 212 dictadas, de las cuales 196 resultaron condenatorias, representando un 97 % del total.