El pasado 22 de septiembre, un incidente alarmante sacudió la tranquila localidad pacense de Guareña, donde la Guardia Civil detuvo a un individuo como el principal sospechoso de intentar asesinar a dos jóvenes utilizando una escopeta de caza.

El detenido fue presentado ante el Juzgado de Instrucción de Don Benito, donde el juez determinó que debía ingresar en prisión preventiva a la espera de más avances en la investigación.

La Guardia Civil ahora se encuentra en la fase de indagación para descubrir las razones detrás de este acto violento que condujo al ciudadano de Guareña a disparar contra las víctimas.

Los hechos ocurrieron en la madrugada del viernes, cuando los agentes fueron alertados sobre el ingreso de dos jóvenes en el Hospital Comarcal de Don Benito-Villanueva de la Serena, quienes presentaban heridas que parecían ser resultado de disparos.

Uno de los heridos sufrió lesiones graves, afectando gravemente su ojo, brazo, cabeza y rostro, y fue urgente trasladarlo al Hospital Universitario de Badajoz para recibir atención especializada.

Las investigaciones, lideradas por el Equipo de Policía Judicial de Villanueva de la Serena y las fuerzas de Delincuencia Organizada Antidrogas, revelaron que el tiroteo tuvo lugar en la pedanía guareñense de Torrefresneda. Las víctimas, que viajaban en un vehículo, fueron abordadas por el sospechoso, quien sin previo aviso disparó desde la vía pública.

El proyectil impactó en el parabrisas del automóvil, alcanzando a los ocupantes de los asientos delanteros. La Guardia Civil confirmó estos detalles en una nota de prensa, subrayando la gravedad del acto.

Con la recolección de pruebas y evidencias en mano, los agentes lograron arrestar al sospechoso unas horas después de la agresión. También se le incautó el arma empleada para perpetrar el ataque. Posteriormente, el detenido fue llevado a las instalaciones de la Guardia Civil para la formalización de las acusaciones de tentativa de homicidio y tenencia ilegal de armas.

Finalmente, la autoridad judicial ha decidido que el sospechoso permanezca en prisión mientras se avanza en la investigación, un paso necesario ante la gravedad de los cargos en su contra.