CÁCERES, 19 Oct. - El presidente de la Diputación de Cáceres, Miguel Ángel Morales, ha destacado el importante rol que juegan los trabajadores de la institución y ha reconocido el labor tanto de los empleados en activo como de los jubilados y jubiladas en un homenaje celebrado en la festividad de San Pedro de Alcántara, patrón de la institución provincial.

Una vez más, el salón de plenos del Palacio Provincial de la Diputación de Cáceres ha sido testigo de la emoción de aquellos que dejan de trabajar tras muchos años de servicio en la institución, así como del reconocimiento por parte de sus compañeros, familiares y amigos.

En su discurso, Morales ha manifestado que no está de acuerdo con la idea de que las instituciones sobrevivan a la ausencia de personas. Ha resaltado la importancia de los trabajadores, quienes han entregado gran parte de su vida a la diputación provincial de Cáceres y ha afirmado que sin ellos la institución sería solo un símbolo vacío.

El presidente ha defendido la vocación por lo público y ha destacado que la esencia del trabajo de la diputación es hacer felices a las personas y construir un proyecto social del que sentirse orgullosos.

Además, ha reflexionado sobre el progreso de la provincia gracias al esfuerzo de muchos individuos, dentro y fuera de las instituciones, haciendo hincapié en la convivencia, la igualdad y el deseo de paz en el mundo.

Finalmente, Morales ha citado a García Márquez, instando a los jubilados y a los que continúan trabajando a no dejar de perseguir sus sueños, a pesar de que la utopía siempre esté en el horizonte. Agradeció a todos por su labor y concluyó su discurso.

En el evento, acompañado por el Grupo de Cámara de la Banda Sinfónica de la Diputación Provincial de Cáceres, se entregaron a los jubilados el tradicional reloj en recuerdo de sus años de servicio en la institución.

Entre los 42 trabajadores que han concluido su vida laboral este año, las más veteranas son María Pilar Picado de la Cruz, con 47 años de servicio como conserje, y Luisa Álvarez García, con 42 años como ordenanza.