En el contexto extremeño, la portavoz de Unidas por Extremadura, Irene de Miguel, ha manifestado su desaprobación hacia la reciente postura de la presidenta de la Junta, María Guardiola. A su juicio, es un despropósito que Guardiola hable de igualdad en la comunidad mientras se alía con Vox para implementar sus políticas, un partido que, según De Miguel, representa un verdadero obstáculo para el progreso en este ámbito.

Durante una rueda de prensa tras asistir a un acto institucional por el Día Internacional de la Mujer, la portavoz enfatizó que los logros hacia la igualdad en Extremadura son prácticamente inexistentes. Criticó la falta de una declaración institucional en la Asamblea, argumentando que esto es un claro ejemplo de cómo Vox bloquea cualquier avance necesario en materia de igualdad.

Además, De Miguel eligió no pasar por alto el discurso de la presidenta en este evento, sugiriendo que no era apropiado que Guardiola se presentara como una víctima, dado que ostenta una posición de privilegio en comparación con el 99% de las mujeres en Extremadura.

Se mostró perpleja ante la necesidad manifestada por la presidenta de fomentar políticas igualitarias, cuando las verdaderas decisiones económicas y fiscales son discutidas únicamente con Vox, un partido que, según ella, desestima la violencia de género en sus discursos.

La portavoz expresó su preocupación por las visiones conservadoras de la extrema derecha, que proponen un regreso a los roles tradicionales de las mujeres en el hogar, argumentando que este partido desconoce las desigualdades actuales que enfrenta la población femenina extremeña, como la alarmante brecha salarial y la elevada tasa de desempleo entre mujeres.

Al ser interrogada sobre los cambios en las posturas políticas en relación con el 8M del próximo año, De Miguel instó a no “blanquear” a la extrema derecha, afirmando que su presencia es un riesgo palpable para las mujeres. Hizo un llamado a la presidenta para que su enfoque se centre en acciones concretas hacia la igualdad, lejos de meras proclamaciones.

De Miguel fue firme en su declaración: “Guardiola debería dejar de lado los discursos y comenzar a actuar de manera efectiva por la igualdad, evitando cualquier intento de normalizar a un partido que representa un peligro real para las mujeres.”

La portavoz también criticó que el Partido Popular solo contactara a su formación para firmar un manifiesto en torno al 8 de marzo, sin mostrar interés por abordar cuestiones críticas como impuestos o presupuestos, lo que, a su parecer, evidencia la falta de compromiso real del PP hacia la igualdad.

De Miguel comentó que la única motivación del PP es obtener una firma para una declaración que carece de validez, ya que no cuenta con el respaldo de Vox. Recordó además problemáticas persistentes en la región, como la imposibilidad de acceder a abortos en la sanidad pública, el cierre de oficinas de igualdad en varias mancomunidades, y la falta de apertura del centro de crisis 24 horas en Mérida.