En la localidad de Don Benito, un individuo de 41 años ha sido arrestado bajo la sospecha de haber asesinado a su esposa de 34 años, con la que compartía la crianza de cuatro hijos menores. Durante la mañana del miércoles, este hombre fue presentado ante el juzgado de guardia de la localidad para responder por los cargos que se le imputan.

El fatal desenlace se suscitó tras la autopsia efectuada el día anterior, que reveló la necesidad de realizar más pruebas para aclarar las circunstancias del fallecimiento. Sorprendentemente, el propio detenido había presentado una denuncia de desaparición el pasado 2 de agosto, alegando que su esposa había desaparecido “días antes”, un hecho que ha generado inquietud entre las autoridades, según ha informado el delegado del Gobierno en Extremadura, José Luis Quintana.

En una rueda de prensa celebrada en Badajoz, Quintana subrayó que la víctima se hallaba en el sistema de protección a víctimas de violencia de género conocido como VioGen; sin embargo, carecía de medidas específicas de protección. En este sentido, se revelaron tres denuncias anteriores formuladas por la mujer contra su presunto agresor, la última de 2021. Pese a ello, el juzgado no había considerado necesario implementar ningún tipo de protección, al evaluar el riesgo como “no apreciado”.

El delegado expresó su consideración sobre la situación familiar, señalando que se podría interpretar como “normalizada” dado el lapso de cuatro años sin nuevas denuncias, durante el cual la pareja tuvo al menos un hijo. Este comentario ha generado diversos debates sobre la interpretación del nivel de riesgo para la víctima.

Aunque la autopsia se finalizó el martes, Quintana reveló que aún se esperan resultados de algunas pruebas que han sido enviadas para análisis a laboratorios especializados, lo que podría esclarecer más detalles sobre las causas del trágico suceso.

En cuanto al cuerpo de la fallecida, se ha informado que será entregado a su familia, quienes tienen la intención de repatriarlo a Marruecos, de donde eran originarios. Esto añade un elemento cultural al caso, ya que implica trasladar a la difunta a su patria en un momento tan doloroso.

El delegado del Gobierno hizo hincapié en la relevancia del papel que desempeña el “entorno” de las víctimas en estas situaciones. En su declaración, destacó la importancia de la colaboración y denuncia por parte de amigos y familiares, advirtiendo que su silencio a menudo complica la intervención de las autoridades en casos de violencia de género.

Por último, en lo que respecta a los cuatro hijos menores que han quedado huérfanos, se ha confirmado que la responsabilidad de determinar su futuro recaerá sobre la fiscalía y el juzgado de menores, quienes tomarán las decisiones pertinentes para garantizar su bienestar en este momento tan crítico.