El presidente de la Diputación de Cáceres, Miguel Ángel Morales, hizo un llamado a Iberdrola para que solicite la extensión de la vida útil de la Central Nuclear de Almaraz, y a su vez, asuma un compromiso social con la región para preservar los puestos de trabajo en el área.

En una reunión con el presidente institucional de Iberdrola Extremadura, David Martín, Morales expresó su preocupación por un posible cierre de la central nuclear, ya que es una fuente significativa de riqueza económica y social en la provincia de Cáceres y en los pueblos de Campo Arañuelo.

Para Morales, el futuro de la central nuclear en Cáceres implica una responsabilidad compartida entre el Gobierno de España, la Junta de Extremadura y las empresas que operan en la zona, quienes deben comprometerse a mantener el bienestar de los habitantes locales.

En respuesta, Iberdrola se comprometió a proporcionar información detallada sobre los costos y presuntos excesos impositivos de la planta nuclear. Sin embargo, Morales reiteró que la responsabilidad de garantizar el bienestar de la comunidad recae en todas las partes involucradas, tanto en el sector público como en el privado.

En última instancia, Morales hizo hincapié en que la prioridad debe ser el bienestar de las personas que residen cerca de Almaraz, y que es esencial que todas las partes involucradas trabajen juntas para asegurar que los habitantes locales puedan seguir disfrutando de una calidad de vida óptima en sus pueblos.