En Mérida, el 4 de agosto, un tema de creciente preocupación ha emergido en la agenda pública: la insuficiencia de personal de enfermería en los centros del Servicio Extremeño de Promoción de la Autonomía y Atención a la Dependencia (Sepad). Esta inquietud fue manifestada por Érika Gutiérrez, secretaria del sector de Autonómica de UGT Servicios Públicos, quien instó a la Junta de Extremadura a convocar una mesa de negociación para abordar esta crisis.

Durante una concentración fuera de las instalaciones del Sepad, Gutiérrez enfatizó que la escasez de enfermeros es un “grave problema” que persiste año tras año, especialmente durante los meses de verano, aunque no se limita a esta temporada. Su crítica se centró en la falta de recursos que afecta a los servicios de salud en toda la comunidad autónoma, resaltando que la situación se vuelve crítica durante las vacaciones, pero que realmente se manifiesta de manera continua a lo largo del año.

Aunque los sindicatos no cuentan con datos específicos sobre el número de puestos cubiertos, Gutiérrez destacó que la realidad es alarmante; en algunos centros, la cobertura de los enfermeros de vacaciones apenas alcanza un 10%. Esto pone de manifiesto un problema estructural que afecta a la calidad de atención que se ofrece a los ciudadanos en un momento en que más se necesita.

La representante sindical criticó también la metodología adoptada para cubrir los puestos vacantes, mencionando que la búsqueda de profesionales se efectúa mediante un simple correo electrónico, lo cual considera ineficiente. Gutiérrez señaló que, a consecuencia de esta ineficacia, hay numerosas guardias sin cubrir, y aquellos enfermeros que logran hacerlo lo hacen sacrificando sus propias vacaciones o trabajando horas extras en turnos prolongados, aumentando así su carga de trabajo durante la época estival.

A pesar de que esta problemática se repite año tras año, la solución sigue siendo esquiva. Gutiérrez subrayó la necesidad de que la Junta atienda su demanda de una mesa de negociación, un reclamo que han mantenido desde principios de año sin respuesta por parte de las autoridades regionales. La comunidad espera con ansias que se tomen medidas para garantizar una atención digna y adecuada para todos los ciudadanos en la región.

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