PERALES DEL PUERTO (CÁCERES), 2 Dic. – En un movimiento que busca fortalecer la agricultura de montaña, Irene de Miguel, candidata de Unidas por Extremadura a la presidencia de la Junta, ha presentado un ambicioso proyecto centrado en la revitalización de cultivos, con especial énfasis en el olivar tradicional. Este esfuerzo, según de Miguel, es esencial para asegurar la viabilidad económica de los productores y contribuir a la prevención de incendios forestales en la región.

La propuesta fue expuesta durante la visita de la candidata a la cooperativa Peraliega Almazara en San Andrés, ubicada en Perales del Puerto, donde estuvo acompañada de otros miembros de su equipo y el secretario de Organización de Podemos, Pablo Fernández. La importancia de este plan radica no solo en la necesidad de garantizar precios justos para los agricultores, sino también en ofrecer ayudas por los beneficios que sus cultivos proporcionan al ecosistema, especialmente en la mitigación de incendios.

Durante su intervención, de Miguel destacó cómo el olivar tradicional ha demostrado ser un eficaz cortafuegos, protegiendo viviendas en diversas localidades durante el verano pasado. Su compromiso con la Ley de Cadena Alimentaria fue otro aspecto relevante de su discurso, subrayando que su implementación es crucial para asegurar la rentabilidad de los pequeños productores. Según su perspectiva, los intermediarios están actuando como un cartel, lo que contribuye al empobrecimiento de los agricultores dedicados al olivar.

De Miguel también ha critiado que tanto los intermediarios como el Gobierno regional, liderado por María Guardiola, están comprometiendo la efectividad de esta ley al no sancionar adecuadamente a aquellos que no cumplen con los costes de producción. La líder de Unidas por Extremadura argumentó que el Partido Popular no está dando la atención necesaria a Economías locales de zonas como la Sierra de Gata y Las Villuercas, afirmando que el olivar es un elemento clave para revitalizar estas comunidades.

En una línea similar, Pablo Fernández se hizo eco de la necesidad de un ámbito rural dinámico, donde los pequeños productores tengan acceso a "precios justos". Para lograr esto, insistió en la importancia de aplicar la Ley de Cadena Alimentaria, criticando el papel de los grandes distribuidores que han estado perjudicando a los pequeños productores, llevándose la mayor parte de los beneficios. Además, Fernández alertó sobre la situación de los servicios públicos en el medio rural, acusando a la administración de Guardiola de desmantelar estas estructuras, lo que dificulta el acceso a servicios básicos como la sanidad y la educación en zonas más aisladas.

Para abordar estos problemas, Fernández subrayó la urgencia de que Unidas por Extremadura esté bien posicionada en el futuro político de la región. En su opinión, el cambio que Extremadura necesita debe ser respaldado por una izquierda robusta que represente los intereses de la comunidad local. Enfatizó que el 21 de diciembre podría marcar un punto de inflexión para que la región obtenga un gobierno que se preocupe sinceramente por su gente, tras muchos años de desatención en comparación con otras regiones de España.

El secretario de Organización de Podemos se mostró optimista sobre el futuro de Extremadura y definió el enfoque de Unidas por Extremadura como una política enfocada en las necesidades y realidades de la región, destacando que la política debe hacerse "desde Extremadura, por Extremadura".