En Mérida, a 8 de diciembre, los expertos del Laboratorio de Control de Calidad del Instituto de Consumo de Extremadura (Incoex) han emitido una serie de recomendaciones dirigidas a los ciudadanos que planean hacer compras de juguetes para esta Navidad. Entre sus consejos más destacados, subrayan la importancia de verificar que el etiquetado del juguete cuente con el marcado CE, el cual asegura que el producto cumple con las estrictas normas de seguridad establecidas por la Unión Europea.

Además de comprobar el marcado, los técnicos del Incoex han instado a los consumidores a considerar la edad recomendada para el uso del juguete. Esta clasificación se establece en función de las habilidades y destrezas propias de cada grupo de edad, tal como ha señalado la Junta en un comunicado oficial. Esta medida es esencial para proporcionar una experiencia de juego segura y adecuada para los más pequeños.

Es fundamental que dicha información esté presente de forma clara, tanto en el propio juguete como en su embalaje. Los juguetes que no están diseñados para un grupo etario específico pueden resultar peligrosos, provocando graves lesiones, tales como asfixia o estrangulamiento. Por ejemplo, los productos destinados a menores de tres años deben mostrar un pictograma con la palabra 'Advertencia', junto a una descripción breve de los posibles peligros asociados, como la presencia de piezas pequeñas o cuerdas largas que pueden causar estrangulamiento.

Una vez que los juguetes sean desenvueltos, se recomienda a los consumidores que eliminen todos los embalajes, así como envoltorios que puedan tener bordes cortantes o que sean duros. Esto es vital para evitar riesgos de asfixia y otras eventualidades peligrosas durante el juego.

Asimismo, es de suma importancia seguir con atención las instrucciones y advertencias que deben presentarse en castellano. Esto asegurará un montaje y uso correcto del juguete. La falta de atención a estas guías podría derivar en situaciones potencialmente peligrosas.

Durante las actividades lúdicas, es imperativo no dejar a los niños sin supervisión. Se debe asegurar que los juguetes sean utilizados de acuerdo con su diseño previniendo así accidentes. Además, es recomendable realizar revisiones periódicas de los juguetes para confirmar que no estén deteriorados y, por ende, representen un riesgo para la seguridad de los pequeños.

Desde el Incoex, han hecho un recordatorio a los padres y cuidadores de que existe una base de datos accesible sobre juguetes que son considerados peligrosos para la seguridad y salud de los niños. Estos productos son objeto de alertas a través de mecanismos tanto nacionales como internacionales y son retirados del mercado para proteger a los consumidores.

Para mayor información, se puede consultar la web de la Red de Alerta Nacional o la Red de Alerta Internacional de la Unión Europea. Cualquier duda respecto a la seguridad de un juguete debe ser dirigida al fabricante, al vendedor, o a las autoridades competentes, quienes están dispuestas a proporcionar la información necesaria.

Finalmente, la Junta de Extremadura invita a los consumidores a que, al momento de adquirir juguetes, opten por aquellos que no sólo entretengan a los niños, sino que también fomenten la creatividad, el aprendizaje y la unión familiar. Este enfoque no solo promueve un tiempo de calidad en familia, sino que también alimenta el desarrollo integral de los más pequeños.